Discográfica: Vagrant
CD 1. Fire:
- "Firebreather" - 4:24
- "The Messenger" - 2:09
- "Backdraft" - 4:08
- "The Arsonist" - 4:13
- "Burn the Fleet" - 3:47
- "The Flame Deluge" - 3:28
CD 2. Water:
- "Digital Sea" - 3:44
- "Open Water" - 3:47
- "Lost Continent" - 4:30
- "Night Diving" - 6:02
- "The Whaler" - 4:09
- "Kings Upon the Main" - 4:56
Músicos:
- Dustin Kensrue - lead vocals, guitar
- Teppei Teranishi - guitar, keyboards, vocals
- Eddie Breckenridge - bass, vocals
- Riley Breckenridge - drums
Thrice es una banda comúnmente clasificada como post-hardcore que me temo
que con su nuevo proyecto se alejan de cualquier etiqueta firme. Ni más ni
menos que una obra conceptual sobre los cuatro elementos, editada en dos
fases. Por un lado Fire y Water que es el lanzamiento que nos ocupa y para
el 2008 la segunda entrega con Earth y Air.
“The Alchemy Index: Vols. I & II – Fire & Water” consta de dos CDs de corta
duración, incluyendo seis temas cada uno, editados conjuntamente a modo de
doble álbum. El volumen “Fire” sería más afín a los Thrice de anteriores
trabajos, mientras que “Water” explora en su totalidad nuevas sonoridades
por parte de los americanos.
“Fire” es, como es de esperar, más agresivo. En su interior podemos
encontrarnos con dos piezas “The Messenger” y “The Arsonist” bastante
violentas que encajan perfectamente con el concepto hardcore de sus inicios,
añadiéndole ciertas dosis metálicas. Mientras que las cuatro restantes ya
resultan temas mucho más ligeros y con capacidad emocional “para todos los
públicos”. A destacar la rabia contenida de “Firebreather”, los contrastes
de la explosiva “Backdraft”, la agresividad calculada de “The Arsonist”, la
dulzura melódica de “Burn the Fleet” y esa brutal “The Flame Deluge” que
hace de enlace con el siguiente capítulo “Water”.
Es precisamente en el segundo volumen donde el grupo se desmarca de sus
anteriores tendencias. “Water” consta de piezas muy relajadas y etéreas en
las que predominan los colchones de teclados perfectamente equiparables a
cualquier banda actual, ya sea de post-rock, prog-rock o ambient pop.
También ritmos muy agradables y tenues que van desde el trip-hop al pop
emotivo. La música que aquí se nos presenta, efectivamente, es análoga al
concepto y sensación del agua. Desde la pura melodía de “Digital Sea”, “Open
Water” o “The Whaler” hasta esas atmósferas de teclados de “Lost Continent”
que recuerdan a gente como Blackfield, pasando por esa sublime instrumental
post-roquera titulada “Night Diving”, o ese delicioso final con “Kings Upon
the Main”, mellotron incluido, que presagia el inicio de un nuevo capítulo
en la obra.
Respecto a la segunda entrega que será editada dentro de unos cuatro meses,
por lo que ha avanzado el grupo, el volumen “Earth” será más íntimo y
acústico, mientras que “Air” recogerá partes de los otros tres elementos. A
esperar pues, los dos capítulos restantes de esta ambiciosa obra que promete
ser todo un referente del rock actual. De momento esta primera mitad resulta
inmejorable.
Valoración: 8.5/10
Ferran Lizana (rockomick@orange.es)
Noviembre 2007
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