Temas
- Ouverture XV
- Raipure
- Invasore
- Lady Ligela
- Narciso
- Ganzheit
- Verso il Lago
- El Re di Raipure
- Sotto i Ponti
- Arlecchinata
- La Saga della Primavera
- Mandragola
Integrantes
- Arturo Stalteri: piano, organo, espineta, sintetizadores, celesta,
percusion, voz
- Vincenzo Caporaletti: guitarra acustica, clasica, de 12 cuerdas, y
electrica, bajo, bateria, flauta
- Gaio Chiocchio: sitar, mandolina, guitarra acustica, organo, percusion,
voz
El sorprendente e imprevisible grupo italiano Pierrot Lunaire comenzo su
breve pero interesante trayectoria discografica con este, su homonimo album
debut. El estilo progresivo que ellos comenzaron cultivando estaba bien
enmarcado en la linea melodica de raiz bucolica, cercanamente emparentada
con la onda de Celeste y la faceta acustica de PFM. El rol de las guitarras
(mayormente acusticas) es fundamental casi todo el tiempo a la hora de
establecer las pautas armonicas y crear los ambientes reflexivos e
intimistas que inundan el repertorio. Por su parte, el fino teclista
Stalteri destila sus cortinas, acordes y solos de piano y organo con una
delicadeza exquisita; sus intervenciones de sintetizador mas que nada
apuntan a complementar con ornamentos y texturas adicionales la labor
realizada por las guitarras acusticas y los teclados mas “convencionales”.
Lo mismo vale para las intervenciones ocasionales de guitarra electrica y
flauta.
Ahora bien, en este disco hay algo mas que un simple catalogo de esbozos y
esquemas amables: de alguna manera se filtran en ciertos pasajes algunos
recursos sonoros ligeramente perturbadores, como si hubiese alguna fuerza de
tension subyacente al predominante clima bucolico, que a duras penas logra
hacerse notar de vez en cuando. Esta tension se manifiesta en algunas
disonancias explotadas con suma sutileza, apelando mas a una belleza
misteriosa que a un desequilibrio deconstructivo. Esto se nota desde ya en
el tema de entrada ‘Ouverture XV’, construido al modo de una pompa palaciega
renacentista, en la cual la energia dispuesta en los acordes de piano
destilan una especie de inquietud en medio del dueto de guitarras acusticas.
Otras muestras de sensibilidad acustica rociada con sorprendentes gotas de
rocio disonante estan contenidas en ‘Invasore’, la sincopada ‘Lady Ligeia’,
y el sombrio ‘Narciso’. Pero por otra parte, la faceta pastoral queda
reflejada con cautivante candor en ‘Raipure’ e ‘Il Re di Raipure’, piezas
muy mediterraneas: lo mismo sucede con ‘Sotto i Ponti’. El instrumental de
cierre ‘Mandragola’ es la pieza mas bizarra del disco: sostenida sobre un
compas marcial de piano, bajo y timpanos, se extiende un motivo recurrente
compartido por el organo y el sintetizador, mientras algunos punteos de
guitarra no exentos de agresividad se disparan a ratos al modo de
contrapuntos ocasionales – finalmente, la coda expone un breve reprise del
motivo del tema anterior, ‘La Saga della Primavera’, con una guitarra
clasica que parece brindar una paz mistica tras la explosion extrovertida de
densidad emocional que tuvo lugar.
Solo me queda concluir resumiendo que “Pierrot Lunaire” es un disco muy
agradable y atractivo, donde la sensibilidad acustica predomina, pero no
impera totalmente. No nos dejemos engañar por los colores que ocupan la
mayor parte de la envoltura: este disco contiene una complejidad
inteligentemente sutil, manejada con elegancia y efectividad en simultaneo.
Cesar Mendoza
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