Temas
- Daybreak (10:03)
- Goodbye (10:13)
- Dear Boy (3:25)
- Edge Of Night (13:02)
Integrantes
- Johan Saanen: bajo
- Paula Mennen: voz, teclados
- Kees Walravens: guitarras, voz
- Peter Fransen: batería, percusión
- Philip de Goey: saxo, flautas, oboe
Formado en 1972 por cuatro amigos de secundaria a quienes se unió un vientista
en el año siguiente, el grupo holandés Mirror es uno de los misterios más
agradables de la primera generación de rock progresivo holandés. Su disco
"Daybreak", el único que llegaron a grabar, salió al mercado en 1976: aunque el
grupo ya contaba con un público de culto en el circuito local y alrededores, su
disco no fue precisamente un éxito de ventas. El estilo de la banda es
esencialmente sinfónico, con algunos elementos jazz-rockeros que salen a
colación para enriquecer el swing; entremos a más detalles repasando el disco
en cuestión.
La pieza homónima abre el disco con un colorido intenso y frontalmente
llamativo que nos remite a los paradigmas del mejor Yes y el Focus clásico,
además de algunos ribetes jazz-rockeros cuasi-Canterburyanos que entran a
tallar en ciertos momentos del desarrollo temático. Portando bastantes
equivalencias con lo que Lift estaba haciendo por su parte en los EE.UU.,
"Daybreak" resulta una apertura fielmente indicativa de los enfoques centrales
que Mirror estaba dispuesto a aportar a la escena progresiva de su país. Será,
a fin de cuentas, el tema más brillante de todo el álbum, pero en general no es
justo pasar por encima del repertorio restante, por lo que vamos ahora a
"Goodbye". A pesar de que su título alude al dulce dolor de la despedida, este
segundo tema no es triste de por sí: su motivo central expresa una serena
aureola de melancolía, principalmente bajo la guía dual de la guitarra y el
oboe, mientras que por otro lado, las traviesas irrupciones de variantes
extrovertidas ayudan a reforzar el colorido esencial del cuerpo compositivo.
"Dear Boy" es la pieza más convencional del disco: es una balada sinfónica que
tiene algo del Curved Air post-Monkman así como cercanías claras con el
estándar del Earth & Fire. Con sus 13 minutos de duración, "Edge Of Night"
cierra el disco con una manifestación de la mayor fastuosidad de que es capaz
el quinteto: exhibiendo aires Eloy-Floydianos combinados con algunas
estilizaciones a lo Trace y reincidiendo en el candor melódico de Earth & Fire,
este tema completa prestamente la ideología de sinfonismo elegante y evocativo
que Mirror se propuso como norte.
A poco de salir al mercado este disco, el grupo hizo varias mini-giras en el
circuito nacional pero no pasó mucho tiempo hasta que se dieran las sucesivas
partidas del bajista y la cantante-teclista. Así las cosas, Mirror solo tenía
la opción de dejar todo ahí, aunque Saanen, De Goey y Walravens volvieron a
unir fuerzas en 1978 para formar un nuevo grupo, Lethe. Este grupo solo logró
editar un disco homónimo en 1981, pero ése es motivo para otra reseña.
Terminamos ésta diciendo que "Daybreak" de Mirror es un ítem fácilmente
apreciable para los coleccionistas ávidos de rock sinfónico de todos los
lugares, épocas y tendencias.
César Mendoza
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