Temas
- Gamma (11:21)
- La Traccia Verde (3:51)
- Il Segno Del Comando (6:34)
- Ritratti Di Donna Velatta (5:03)
- Ho Incontrato Un"Ombra (17:51)
Integrantes
- Fabio Zuffanti: bajo, guitarra
- Agostino Macor: teclados
- Mau Di Tollo: batería
Colaboradores - Andrea Monetti (flauta), Alessandro Corvaglia (voz), Paolo
Fulvio Marrasso (contrabajo), Enrico Goua (trompeta), Gianni Allevi (saxo)
L"Ombra Della Sera es un proyecto progresivo conformado por el trío de Fabio
Zuffanti, Agostino Macor: teclados y Mau Di Tollo: sí, estos incansables
trabajólicos de la vanguardia rockera italiana (especialmente los dos
primeros), colegas de La Maschera Di Cera, y adicionalmente, de Röhmer,
Finisterre, Zaal y otras empresas musicales diversas, vuelven a la carga con
este nuevo ítem en sus respectivos currículos. Este proyecto basa su misión
musical en la readaptación de temas de series televisivas italianas de los 70s.
En efecto, el repertorio de este disco, titulado al igual que la banda,
consiste en composiciones pertenecientes respectivamente a Enrico Simonetti,
Riz Ortolani, Berto Pisano y Romeo Grano, siendo así que el trío y sus diversos
colaboradores de turno organizan sonoridades muy a lo retro-prog en torno a las
composiciones originales. El grupo se ha concentrado en usar genuina
instrumentación antigua: órgano Hammond, pianos eléctricos y de cola,
sintetizadores analógicos=85 y cómo no, el infaltable mellotrón. De esta
manera, el ensamble logra recrear muchos de los prototipos y trucos recurrentes
en el revival prog 90ero (especialmente en las áreas itálica y escandinava),
además de permitirse desarrollar varios experimentos sónicos de fuerte carga
psicodélica en lugares estratégicos. Repasemos ahora este disco en cuestión
para ver los detalles.
"Gamma" empieza con una atmósfera expectante que se revela como estilizadamente
terrorífica, con lo cual el ensamble prepara el camino para un cuerpo central
solemne. En un primer momento, los trazos del sintetizador a través del motivo
central tienen músculo sin alterar su naturaleza romántica, casi cursi,
llevando sobre sus hombros el núcleo rector del sonido grupal. A medida que
avanza el tema, la instrumentación global empieza a llenar espacios con
creciente entusiasmo mientras va afilando sus recursos de expresividad y
enriqueciéndose con ornamentos space-rockeros apropiadamente recargados. El
momento de "La Traccia Verde" es uno de serenidad contemplativa: la placidez
inherente al motivo musical adquiere una refrescante aureola de misterio merced
a los matices brumosos derivados de los teclados antiguos (principalmente, el
mellotrón). "Il Segno Del Comando" desarrolla una vigorosa cadencia funky que
permite al ensamble darle una agilidad peculiar y renovadora a su sonido, y de
paso, brindar una vibración relajante a la melodía central y ulteriores
improvisaciones del piano eléctrico y la flauta; por su parte, "Ritratti Di
Donna Velatta" se refugia en distantes atmósferas psicodélicas de raigambre
post-rockera, donde el canto de Corvaglia aporta el único recurso de calidez.
La gema decisiva del disco está en "Ho Incontrato Un"Ombra", tema que ocupa un
espacio de casi 18 minutos para cancelar el disco con electrizantes despliegues
de descarga emocional. Los primeros tres minutos de la pieza están marcados por
un tenor delicadamente romántico, incluso ligeramente triste, al modo de una
pesada melancolía que esparce su peso equilibradamente sobre los cimientos del
corazón. Un segundo motivo emerge sostenidamente para virar hacia un área
emocional totalmente distinta, signada por la tensión que atraviesa una
oscuridad amenazante e imponente: el posicionamiento de las agresivamente
omnívoras capas de mellotrón, los neuróticos fraseos del saxo y el swing
agresivo de la dupla rítmica gritan a viva voz sus afinidades con los
estándares de Morte Macabre y el primer Anekdoten. Tras la conclusión de esta
exquisitamente siniestra sección, sigue un motivo aleatorio impregnado de
psicodelia free-form que usualmente se asocia a las facetas más caóticas del
krautrock electrónico (pensemos en los primeros discos de Cluster y el estándar
del "Atem" de Tangerine Dream). Este motivo se devela como un interludio
preparatorio para otra sección siniestra, esta vez amalgamada bajo la lógica
del Zeuhl (con una actitud modernizada a lo Guapo). La flauta desarrolla sus
dibujos sónicos con cómoda agilidad a través de la machacona densidad
establecida por la triangulación de teclado-bajo-batería, y una vez más, las
capas de mellotrón entran en acción de manera arrolladora. No tarda mucho el
ensamble en recurrir a trucos caóticos para evitar caer en el mecanicismo, lo
cual ayuda esencialmente a realzar la de por sí poderosa densidad en curso, y
no solo eso, sino que también resulta vital para brindar la suficiente
intensidad sombría a la climática aventura sónica que antecede a la coda. Como
despidiendo el momento en que el cosmos mostró sus fauces ocultas, las
delicadas últimas líneas de piano eléctrico nos devuelven a la triste calma
inicial, aunque el oyente ya ha sido transformado después de lo que se le
reveló.
En fin, tenemos en L"Ombra Della Sera un sólido referente para seguir
disfrutando de las estupendas ofertas progresivas que siguen surgiendo de
Italia prácticamente sin parar: nuestras palabras de enhorabuena para los Sres.
Di Tollo, Macor y Zuffanti por otra labor muy bien hecha en nombre de la
preservación del género progresivo dentro de la actual realidad rockera.
César Mendoza
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