Temas
- Ef (4:12)
- Contra (3:45)
- Infinite Mirror (4:39)
- Shinkai (5:23)
- Black And White (4:14)
- Interlude (1:34)
- Ghost Dance (4:31)
- Solitude (5:49)
- Phantasia (5:08)
- Fade (5:26)
- Sequel To The Letter (2:59)
Integrantes
- Nobuyuki Takeda: guitarras
- Kozo Kusumoto: guitarras
- Jun Izawa: bajo
- Akinori Yamamoto: batería
Lite formas parte de la nutrida hornada de bandas formadas y forjadas en el
underground de Tokio desde fines del milenio pasado, dispuestas a aportar no un
grano de arena sino una duna entera a la preservación del math-rock como
iniciativa de experimentación rockera para nuestros tiempos. "Phantasia" es el
nombre de su tercer CD de larga duración (su discografía también incluye un par
de EPs). Sus esquemas sonoros a la hora de componer y arreglar su repertorio
los acercan más al dinamismo frontal de Muddy World que a la neurosis exigente
de Nuito, por poner a referentes compatriotas como base para la descripción.
Considerando el panorama general del circuito mundial del math-rock, Lite es
una de las bandas nipones más celebradas por la prensa musical internauta,
instalada en un nivel bastante cercano al de sus compatriotas de Mono en el
área del post-rock, donde ya se erige como un referente fundamental.
Los primeros 4 minutos y pico del álbum están ocupados por 'Ef', tema donde
predomina el compás de 6/8, un factor que le ayuda a mantener un swing especial
como base de los guitarreos moderadamente aguerridos: hay un espíritu de
confluencia entre el Don Caballero post-Williams e Isis. De ahí sigue 'Contra',
una pieza que se explaya en un ambiente menos sofisticado que el del tema de
apertura, aunque cabe destacar que se explota el lado pesado de los guitarreos
bajo una modalidad más ágil: hay ciertas semejanzas con sus compatriotas de
Muddy World, tal como mencionamos en el primer párrafo de la reseña. 'Infinite
Mirror' ofrece una capitalización más robusta y notoria de la extroversión
propia del math-rock, con un dinámico destaque de matices funky en la batería;
este detalle más el uso de sencillas secuencias de acordes hace que la pieza
esencialmente parezca un ejercicio de post-rock bailable empapado de ciertos
niveles de elementos a lo Primus. 'Shinkai' refuerza en cierta medida esta
sensación de estar presenciando auditivamente el desarrollo de replanteamientos
"bailables" de post-rock durante el transcurso de su primer motivo, aunque
ahora cabe notar que los punteos de la guitarra solista y el patentemente
complejo arreglo rítmico de la batería ofrecen conexiones con el jazz-rock. A
poco de pasada la barrera de los 3 minutos, el grupo se engarza en un poderoso
motivo explosivamente rockero donde las ansiedades math-rockeras levemente
coquetean con el caos; los últimos 45 segundos sirven para retomar una porción
resumida del primer motivo. 'Black And White' se focaliza en un entramado de
parcial inspiración crimsoniana, además de sonoridades musculares que oscilan
entre la psicodelia pesada y lo metalero. Tras momentos como éste, siempre
viene bien un momento de relax contemplativo, algo que efectivamente nos ofrece
'Interlude' en base a un hermoso motivo de guitarra acústica sazonado con el
leve rocío del piano eléctrico. 'Ghost Dance' se sitúa en una posición de
congregar la energía rotunda de 'Black And White' y la exquisitez rítmica de
'Shinkai', con lo cual se erige como un cénit decisivo del disco.
'Solitude' trae un interesante cambio de registro: comienza como un ejercicio
lánguido de post-rock en clave de vals, para luego virar a una sección un poco
más extrovertida en 5/4, aunque la aureola de obsesión por el ensimismamiento
sigue presente. Recién cuando las cosas se tornan auténticamente explosivas
sobre un compás de 6/8 desarrollado exultantemente por el baterista es que la
languidez espiritual deja paso a una furia redentora y asertiva; la coda
consiste en un reprise del primer motivo, alimentado con una dosis extra de
fuerza expresiva que indudablemente se hace eco de las cosas que habían
sucedido dos minutos antes. La pieza homónima asume el patrón de confluencia
entre intrincada neurosis y osados contrastes que ya se hizo presente en varias
piezas anteriores, y de hecho hay ciertos pasajes donde la densidad generada
por la interacción de las guitarras duales es tan brutal como hipnótica; otros
pasajes de base rítmica funky dan ocasión a la dupla rítmica de seguir
incorporando matices jazz-rockeros a la arquitectura extravagantemente
alucinada de la pieza. En pocas palabras, otro cénit del disco. 'Fade' apela
nuevamente a la faceta más introvertida del grupo, una faceta menos habitual
pero no por ello menos auténtica, y de hecho, generadora de momentos de cálida
belleza: el tenor aquí es de tendencia post-rockera, con una calculada
musculatura que tiene aires de familia con Isis. 'Sequel To The Letter' cierra
el disco con aires crimsonianos suavizados y traducidos a un discurso de estilo
Do Make Say Think: un epílogo evocativo que tuvo mucho de todo, con énfasis en
hogueras de plenitud luminosa pero también con bastante espacio para nubes y
atmósferas otoñales. Esta primera experiencia con Lite a través de "Phantasia"
ha sido bastante positiva, revelándonos con convincentes argumentos sónicos por
qué suele cosechar tantos buenos comentarios en la red internauta.
César Mendoza
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