Temas
- Pullas
- Horizontes y Senderos
- M’Hey de Guardar
- Tanta Lagrima Regada
- Los Capiangos
- Recuerdos de Monserrat
- Maldito Amor
- Lamento del Salitral
- Polquita Cruceña
- Milonga del Silencio
Integrantes
- Susana Lago: canto, piano, organo, pinkullo
- Bruno Pizzamiglio: oboe
- Quique Alvarado: bajo, sintetizador
- Ruben Izarrualde: flauta, canto
- Juan Carlos Licari: bateria, percusion
- Ricardo Martinez: bateria, percusion
- Jose Luis Castiñeira de Dios. Guitarra, charango
Anacrusa fue una de las bandas pioneras de la fusion folklorica, con lo cual
planteaban su mision artistica de revitalizar el folk latinoamericano con
nuevos aires sonoros (principalmente, provenientes del jazz) a la vez que
mantenian una solida fidelidad a las mismas raices del folk: la direccion
artistica de Anacrusa se regia bajo la batuta del guitarrista Jose Luis
Castiñeira de Dios. La dualidad entre la leal mirada a la tradicion y la
apertura a refrescantes perspectivas nuevas es manejada por la banda con
inteligencia y pulcritud. Este, su tercer disco, es el muestra una robusta
madurez en la linea musical del ensamble. El rol crucial que cumplen las
maderas a la hora de articular las lineas melodicas basicas o complementar
las estrofas de piano y acordes de guitarra permite al grupo incorporar
aires de clasicismo – con ello se logra realzar la exquisitez propia de las
melodias (algunas originales, otras tomadas de grandes nombres del folklore
de diversos paises latinoamericanos).
En este album se respiran los aires añejos del folklore criollo del Peru (la
marinera ‘M’hey de Guardar’ - de autoria de la legendaria Chabuca Granda - y
el vals ‘Maldito Amor’), Venezuela (el joropo ‘Pullas’), la Puna
nor-occidental argentina (la hermosa vidala ‘Tanta lagrima Regada’) y
Bolivia (‘Polquita Cruceña’), con la misma frescura que ofrecen las
composiciones propias de Castiñeira de Dios y Lago en clave de candombe (6),
vidala (8) o milonga (10). Si bien la picardia multicolor tan tipica de las
diversas musicas hispanoamericanas son manejadas con obvia intensidad por el
ensamble, a mi, en lo personal, me complacen mas esos temas donde lo
nostalgico y lo melancolico predominan a fin de crear paisajes sonoros de
tendencia densa. Por ello, las piezas de este disco que mas aprecio son
‘Horizontes y Senderos’, ‘Tanta Lagrima Regada’ y ‘Milonga del Silencio’.
Añado una excepcion a esta “regla”: la hermosa chuya ‘Los Capiangos’, cuya
magia melodica es simplemente arrebatadora, siendo asi que, despues de
terminada, su cadencia sigue haciendo eco en la mente del oyente.
En este mundo de etiquetas, me parece que, a priori, la reseña de un disco
como “Anacrusa II” tendria mas sentido en un sitio dedicado al world music o
al jazz fusion, pero creo que, de todas maneras, en este foro progresivo
resulta importante difundir musica que busca crear algo nuevo (y a ratos,
heterodoxo) a partir de los parametros de la vieja tradicion, no para romper
con ella, sino para revitalizarla.
Cesar Mendoza
[Reseña dedicada a Pablo Wally]
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