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Canciones" (2009)
Temas
- Lluvia de florcitas
- Estudio 1
- Jardín e noviembre
- Petit obertura para cuatro instrumentos de cuerda
- Caía el sol
- Pasaje dos
- Resumen de un instante
- Atardecer de invierno y meditando
- Juegos de azar - Partes III, IV y V
- Evocación a una época antigua y a Erik Satie
- Avanza con cuidado
- Sobre las pampas a veces hay tormenta
- De la Dama del Bosque
- Danza III: Elevarse
- Barril cayendo desde la cima
- Los días de la decisión
- Banba
Aldo Pinelli: guitarras clásicas, acústica y eléctricas, bajo, laúd, teclados,
percusión y voz
Colaboradores - Paula Dolcera (flauta y cello), Silvia Pratolongo (percusión en
13 y 14), Eliabeth Minervini (teclado en 3 y 17)
"Mantos y Tapices Superpuestos - Otra Selección de Viejas Canciones" es el
título del segundo disco de Aldo Pinelli, guitarrista y multiinstrumentalista
argentino cuya línea de trabajo se halla a medio camino entre las inquietudes
renacentistas y juglares de Anthony Philliups, el academicismo barroco del
Steve Hackett acústico y la dimensión pastoral del corazón celta de Mike
Oldfield. El repertorio de este disco sucesor de "Montañas, Bosques y Lagos"
fue grabado en diversas sesiones de 2007, 2008 y 2009, y además, incluye
composiciones temáticamente conectadas con el primer disco que acabamos de
mencionar. En realidad, ambos discos conforman un continuum, pueden escucharse
de forma sucesiva e integrarse en una experiencia estética fluida y unitaria.
El disco comienza con la agilidad ceremoniosa de 'Lluvia de florcitas' y
'Estudio 1', siendo el primero patentemente juguetón (en no poca medida debido
a la presencia de la flauta) mientras que el segundo guarda una actitud más
solemne, concentrada en su propia arquitectura. Tras la atmósfera un tanto
new-age de 'Jardín de noviembre' (tema al piano), la 'Petit obertura' aporta un
tono un poco más aguerrido, casi marcial, siempre desde un esquema palaciego. Y
es aquí donde llega 'Caía el sol', tema empapado de patente candidez al modo de
una canción de cuna. Más adelante, en la secuencia de tres partes de 'Juegos de
azar' nos topamos con una estupendo sumario del imaginario musical de Pinelli:
la parte III es frontalmente pastoral con inocultadas cadencias fusionescas, la
parte IV se revela seria y sobria, y finalmente, la parte V exhibe una
jovialidad estilizada de manera efectiva. 'Evocación a una época antigua y a
Erik Satie' comienza como jugando con sutilezas a través de vacíos enmarcados
entre los acordes emergentes, mas durante el desarrollo melódico de la pieza en
cuestión se va armando gradualmente un clima más lleno. 'Avanza con cuidado' se
basa en un guitarreo que coquetea con el bossanova, siendo así que los
armazones de cello que se unen un poco más tarde logran conjurar una aureola
solemne al asunto. 'Sobre las pampas a veces hay tormenta' cambia de espíritu
para transportarnos hacia una suavidad melancólica envolvente: cuando la
guitarra eléctrica entra a tallar dentro de este tapiz sonoro, la pieza
adquiere un carácter más firme, lo cual sirve para que afiance una serie de
variantes melódicas muy bien hiladas. Tal vez se trate de la composición más
compleja de todo el álbum. Con los aires renacentistas de 'Danza III' y el
moderadamente fastuoso romanticismo de 'Los días de la decisión', el terreno
está preparado para que 'Banba' cierre el disco con ambientes de trova
empapados de tendencias celtas, plasmando así un colorido cálido y entusiasta.
"Mantos y Tapices Superpuestos" es un disco para relajarse, n ocabe duda de
esta intencionalidad estética de trasfondo, pero también es una obra que
ostenta su propia fineza inherente, por lo que nos invita a darle varias
escuchas atentas para descubrir y redescubrir matices y adornos con miras a una
adecuada degustación de la oferta musical de Aldo Pinelli.
César Mendoza
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