Temas
- 14.06.1999
- Czekam
- Jezebel
- Szalenstwo Przyszlo Noca
- Spowiedz
- Anatema, Czyli Moje Obsesjie
- Petla Medialna
- Noel
- '37
- Medalion
- Iris
- Oczyszczenie
- Moje Mantry
Integrantes
- Adam Lassa: voz
- Szymon Brzezinski: guitarras
- Marcin Blaszczyk: teclados y flauta
- Rafal Ratajczak: bajo
- Marcin Mak: bateria y percusion
El tercer disco de Abraxas seria el de despedida para esta banda polaca. La
tendencia estilisitica de Q99R ahonda en la vertiente vanguardista que ya se
dejaba atisbar en QCenturieR, su inmediato predecesor. Hay un mayor acento
narrativo, pues una buena parte de las letras aparece interpretada por el
vocalista mediante el recitado. Otro factor que realza el aire de relato de
"99" es la presencia de varios breves interludios instrumentales (como
Czekam y Q37), que producen un efecto semejante al de la transicion de una
escena a otra en la secuencia de una historia. Yo siento que este disco no
alcanza el sentido de cohesion que si era perfectamente redondeado en los
dos trabajos precedentes, no por la carencia de buenas ideas musicales, sino
porque estas no se ensamblan en una vision completa de conjunto: pero en
lineas generales, es justo señalar que este disco supone otro triunfo
artistico para Abraxas.
El tema de entrada 14.06.1999 es un ejercicio efectivo de poder rockero. Es
recien en Jezebel que las aristas mas decididamente progresivas empiezan a
hacerse notar: es un tema soberbiamente colorido, de corte epico, pletorico
de densidad emocional. La misma actitud se repite en Iris y Noel, aunque en
estos la cuota de emotividad es mas medida. Anatema, Czyli Moje Obsesje
tambien exhibe una notable ambicion artistica, aunque en su caso se siente
un tanto mas oscura, casi 'impenetrable' a ratos. El tema de mayor gancho
melodico es Spowiedz, pegadizo, y ejecutado con genuina fuerza rockera; por
su parte, la vanguardia electronica se hace muy presente en Petla Medialna.
Los dos ultimos temas exploran ambientes mas reposados: en especial destaco
Moje Mantry, por el notable manejo de las texturas sinfonicas en los
teclados, y el solo de guitarra persistente que envuelve emocionalmente al
oyente.
En resumen, este disco es el broche de oro que cerro la bastante meritoria
carrera discografica de Abraxas (aparte de su disco en vivo 'In Memorium').
Cesar Mendoza
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