- Genealogia
- Polaris
- Torre del Lago
- Via Beato Angelico
- (In) Vino Veritas
- Monti Pallidi
- Grandi Spazi
- Old Vienna
- Sidney's Call
Integrantes:
- Bruno Biriaco: batería, percusión
- Franco D'Andrea: pianos, sintetizador
- Claudio Fasoli: saxos, percusión
- Tony Sidney: guitarras, percusión
- Giovanni Tommaso: bajo, contrabajo, sintetizador, percusión
Colaborador – Mandrake (percusión en 2 y 4)
Después de reforzar su presencia dentro de la escena jazzera de su país con
su hermosos segundo disco “Abbiamo Tutti un Blues da Piangere”, el excelente
y exquisito ensamble italiano Perigeo decidió dar un paso más adelante y
enriquecer su pauta musical básica a través del repertorio que conforma su
tercer trabajo “Genealogia”. El grupo da rienda suelta a su ingenio creativo
y a su talento para sonar como un todo integralmente unificado a través de
sus partes haciendo un uso inteligente de la paleta sonora ampliada en esta
ocasión.
El tema homónimo abre el disco con una aura psicodélica adecuadamente
provista por los ornamentos iniciales del sintetizador, sazonados sutilmente
por gotas de rocío emitidas desde la guitarra acústica y el contrabajo. Una
vez que el grupo entra en acción, las cosas adquieren una frescura
contagiante sin ser realmente pegadizas, siempre con un aspecto misteriosos
flotando en el aire mientras la banda va desarrollando la línea melódica
básica. Lo pegadizo se hace notar más claramente en piezas como ‘Polaris’ y
‘Via Beato Angelico’ – este último, con una estupenda introducción colorida
pero sin excesos – en las cuales la banda profundiza en el swing del funky y
del latin-jazz dentro de sus pautas jazz-rock decisivamente influidas por
Weather Report. El tema ‘(In ) Vino Veritas’ pone más obviamente sobre el
tapete la gran deuda que Perigeo tiene para con el legado de Wazinul & co.
Ya que sacamos a colación a esta pieza, aprovecho para llamar la atención
especialmente sobre el explosivo solo de guitarra a cargo de Sidney: espero
no estar exagerando cuando digo que su destreza técnica y pasión en sus
fraseos lo ponen a la altura (no un ápice menos) de un McLaughlin. Antes de
seguir adelante con el repaso general de “Genealogía”, no quiero pasar por
alto a la hermosa y breve sonata con base de piano ‘Torre del Lago’, un
paisaje musical envolvente en el cual las flotantes secuencia de piano
parecen traducir con espíritu fiel el flujo cadencioso de las aguas
provocado por suaves ramalazos de una brisa de otoño.
El lirismo de ‘Monti Pallidi’ nos tiene al tanto de la capacidad de Perigeo
para trabajar con una melodía básica amable con incidencia sin agotarla
innecesariamente. Con una tendencia similarmente lírica emerge ‘Grandi
Spazi’, aunque esta vez el diálogo entre el piano eléctrico y el contrabajo
convocan imágenes más cósmicas: la presencia ulterior del saxo soprano
realza el lirismo onírico del tema. ‘Old Vienna’ nos devuelve a un clima de
fuerza, lo cual resulta idóneo para otro momento de lucimiento inapelable de
parte de Sidney. Lo último cinco minutos viene ocupados por ‘Sidney’s Call’,
cuyos dos primeros minutos conforman un jam de guitarra acústica y congas
con cierto sabor tribal, muy estilizado, mientras que el resto se centra en
una confluencia de Return to Forever y Weather Report, hecha con buen gusto.
Antes del reprise del motivo inicial, sin congas, hay un solo de batería a
cargo de Biriaco.
“Genealogia” anticipa, e incluso ya anuncia, la línea de trabajo que el
grupo habría de plasmar en su cuarto disco “Il Valle dei Templi’” justo un
año después. Ambos trabajos, junto con “Abbiamo Tutti un Blues..” conforman
lo mejorcito que, EMMO., ha hecho Perigeo en toda su carrera. “Genealogia”
es un ítem que no tiene pierde, óptimo para cualquier colección de
jazz-rock, y por supuesto, altamente recomendable para cualquier fan
progresivo con una marcada sensibilidad jazzera.
César Mendoza
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