• Mike Oldfield - Electric Piano Vibraphone & Vocals
• Pierre Moerlen - Drums (also Vibraphone)
• Alan Schwwartzberg & Maurice Pert - Drums
• Niel Jason, Hansford Rowe, Francisco Centeno - Bass
• Nicko Ramsden & Peter Lemer - Keyboards
• Sally Cooper - Tubular Bells
• Horns arranged by Peter Gordon & Michael Riesman
• Vocals arranged by David Bedford
• Vocals on 'I Got rhytmn' by Wendy Roberts
• Congas: Demalza

1. Part One: Airborne 5:06
2. Part Two: Platinum 6:03
3. Part Three: Charleston 3:17
4. Part Four: North Star/Platinum Finale 4:43
5. Woodhenge 4:06
6. Sally 5:00
7. Punkadiddle 4:56
8. I Got Rhythm 4:40

En este disco Olfield empieza con una suite que nos servira de perfecto avance de lo que sera su musica en los 80, en los que habia una larga suite y la resta de temas tenian una duracion mas corta y un enfoque mas comercial. La suite esta dividid en 4 subpartes. Para mi la parte mas interesante es la tercera con unos sensacionales arreglos de vientos, aunque en ocasiones tambien resulta un poco monotona, la ultima parte nos ofrece al Olfield mas simfonico, con el final apoteosico tan comun a algunas de las suites del RSP, con el sonido tan caracteristico de la electrica de Olfield erigiendose como absoluta protagonista y unos coros grandiloquentes intercalados en mitad del tema.

Wodhenge nos ofrece el lado mas reposado y ambient del disco con percusiones de todo tipo y una guitarra electria con ecos y efectos de Olfield. El tema roza un poco lo experimental pero resulta agradable de escuchar.

Sally tambien es una perfecta carta de presentacion de lo que seran las canciones cortas, aunque algunas para nada desdenyables, de la epoca ochentera de Oldfield. Como casi siempre, Oldfield recurre a una voz femenina. Sin duda, una bonita cancion.

Punkadiddle empieza a mostrar a un Oldfield un poco escaso de ideas. Para mi el tema mas aburrido del disco, excesivamente repetitivo.

Cierra el disco I Got Rhythm, un tema que no esta del todo mal. Tema cantado, como no, por una voz femenina.

A pesar de no ser uno de sus mejores discos, sigue siendo un disco con cosas interesantes a ofrecer. Los arreglos de las canciones siguen teniendo el sello y la esencia de Oldfield. No obstante, hay que aclarar que cada vez Oldfield es mas aburrido y empieza a denotar un poco de falta de ideas. Este disco supone un acercamiento a terrenos mas comerciales dejando a un lado la mecanica compositiva perpetrada anteriormente, en el que cada uno de los lados del vinilo era ocupado por un unico tema. A reprochar, la falta de los momentos delicados y de exquisita factura que nos podemos encontrar en sus 4 primeros discos de estudio.

Putuacion: 6/10

Jordi Boix