Temas
- Film at 11
- The Pursuit of Happiness
- Killing with Kindness
- Misanthropic Cattle
- Regaining the Feel
- Counting Sand
- Red Pill
- Military Mindset
- Mechanical Pencil
- Ungrateful
Integrantes
- Jonn Buzby: teclados, voz
- John Covach: guitarras, coros
- Wes Hare: batería, percusión
- Gerald Wilson: bajo, coros
Segundo trabajo del grupo sucedáneo del efímero combo norteamericano Finneus
Gauge (que, a su vez, era sucedáneo de Echolyn durante su breve lapso de
desintegración). Liderado por John Buzby, hermano de Christopher (teclista y
uno de los pilares creativos de los ya mencionados Echolyn) y también
teclista, Land of Chocolate cultiva un sonido semejante en muchos sentidos
al Echolyn actual, pero en realidad tienen una semejanza más intensiva con
Frogg Café, pues esa combinación especial de sinfonismo, jazz-rock y
progresivo experimental es remitida con una garra especial y un uso
extrañamente delicado de disonancias patentes que nos remite más
inmediatamente a los gestores de “Creatures” y “Fortunate Observer of Time”.
En principio, quienes gusten mucho de estos grupos que acabo de mencionar no
tendrían muchos problemas en sentir una fuerte empatía con el repertorio de
un disco como “Regaining the Feel”. Para este disco en cuestión, el único
miembro permanente era Buzby, pero tal como leo en varios sitios de
Internet, el sonido grupal seguía siendo el mismo.
El repertorio se deja escuchar como una seguidilla debido al esquema tan
preciso y bien definido que maneja el grupo a la hora de crear y arreglar
sus ideas: armonías instrumentales y vocales que barajan quiebres y
disonancias amables de cariz jazzero sin ir más allá de una complejidad
moderada, ejecuciones ágiles y muy bien afiatadas, cambios fluidos de ritmos
que casi ni se notan hasta que han sucedido, un swing ameno que permite
encuadrar los instrumentos en una amalgama donde los lucimientos
particulares no caigan en hipérboles innecesarias. ‘Film at 11’, el tema de
apertura, tiene un gancho accesible sin caer en el facilismo, pues siempre
hay espacio para arreglos típicamente progresivos. Lo mismo sucederá poco
después con el tema homónimo, un ejercicio de jazz-rock y funky con
ornamentos progresivos insertados de manera natural. Las dos siguientes
piezas portan una aureola un poco más patentemente bizarra – ‘The Pursuit of
Happiness’ inclina la balanza hacia lo jazzero, mientras que ‘Killing with
Kindness’ endurece un poco el sonido en algunos pasajes con el empleo de
recursos psicodélicos en los riffs de guitarra y algunos efectos cruciales
de teclado. ‘Killing…’ es una de las piezas más efectivas del disco en
cuanto a expresividad sonora dentro de la pauta estilística del grupo.
‘Misanthropic Cattle’ ofrece una cadencia melódica más introvertida, no
demasiado lánguida en realidad: los libres fraseos de guitarra crean una
especie de brisa que rodea la actitud reflexiva que asume Buzby en su canto.
‘Counting Sand’ también contiene guitarreos fieros, aunque en esta ocasión
hay un contraste más marcado entre los pasajes más fuertes y los menos
fuertes: en lo personal, no me hubiera molestado que esta pieza se hubiese
beneficiado de una expansión más ambiciosa, pues al igual que ‘Killing…’,
logra mostrar sin tapujo alguno la faceta más ambiciosa de LOC. ‘Red Pill’
nos devuelve a la introversión del tema 4 con una dosis extra de garra
rockera en algunos pasajes. El ímpetu sutilmente complejo y elegantemente
sincopado de ‘Military Mindset’ opera como efectivo contrapunto. El
instrumental ‘Mechanical Pencil’ comienza con un misterioso solo de guitarra
clásica con cuyas últimas notas se introduce el riff sobre el que se arma el
dinámico motivo central. Una vez más, tenemos aquí un genuino despliegue de
gancho y dinamismo. En fin, la última pieza comienza con un compás lánguido
que alude a la intriga y el misterio antes de que irrumpan los golpes más
salvajes de guitarra y batería en fiel consonancia con el compás básico:
‘Ungrateful’, con su aura reflexiva y la ocasional aparición de momentos un
poco más furiosos, funciona como un cierre oportuno.
Este disco supone uno de mis descubrimientos más interesantes para este año
2007 que acaba de empezar: Land of Chocolate es un delicatessen progresivo
recomendado para los amantes afanosos de Echolyn, Frogg Café y Happy the
Man.
César Mendoza
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