Temas
- Arabesque
- Betwixt
- Rambling
- Quicksilver
- Counterpoint
- Presage
- Doldrums
- Exodus
- Sluice
- Freestone
- Gibraltar
- Tantrum
Integrantes
- Natsuki Kido: guitarras
- Mitsuru Nasuno: bajo
- Tatsuya Yoshida: batería, percusión
Entre su pasado periplo en Ruins y su actual estancia en Koenjihyakkei, el
talentoso y lunático baterista japonés Tatsuya Yoshida unió fuerzas con el
guitarrista de Bondage Fruit y el bajista de Ground Zero para formar un
súper-grupo bajo el formato de power-trío: dado el bagaje de los grupos de
donde provenían los integrantes individuales, es de poco extrañar que
Korekyojinn se dedicara a cultivar un tipo especial de prog vanguardista,
tirado decididamente hacia el estilo zheul y poniendo énfasis en la creación de
sonoridades macizas y sólidas. El grupo sabe explotar a las mil maravillas la
estructura de trío para asentar unos cimientos sobre las precisas ideas
centrales que se exponen en cada pieza, para a partir de allí generar un campo
para la generación de soltura y dinamismo. Hay tanta energía como en cualquier
disco de Ruins y tanta neurosis perturbadora como en cualquier disco de Bondage
Fruit, pero definitivamente el resultado final es más controlado, lo cual
supone que es menos extravagante que el estándar de Ruins, y también menos
siniestro y menos misterioso que el estándar de BF. Con todo, esto no es un
progresivo vanguardista de fácil escucha, pues Korekyojinn sabe cómo causar
perturbación sin renunciar al control y medición de los jams, solos y adornos
que manejan en cada tema.
91Arabesque 92 es un tema de apertura como Dios manda, efectivo y potente,
incluso con gancho, aunque para nada facilón: el virtuosismo medido permite al
grupo manejar fluidamente el dinamismo inherente a la pieza, siendo así que su
potencia nunca llega a apabullar. Por su parte, 91Betwixt 92 aparece como una
pieza más controlada, reflejando una especie de cruza entre Happy Family (otros
ilustres prog-vanguardistas de la Tierra del Sol Naciente) y el King Crimson
moderno. El tercer tema consiste en una breve serie de cadencias exóticas
(entre arabescas y gitanas) que apelan al registro de la fusión, aunque hay
algo inconfundiblemente bizarro en los fraseos emitidos a través de la guitarra
acústica. Más adelante, 91Presage 92, 91Tantrum 92 y 91Sluice 92 apelarán al
mismo recurso de fusión acústica, de este modo aportando algo de relax mental
en medio del tono general incendiario del disco. 91Quicksilver 92 es casi una
recapitulación de los espíritus respectivos de las dos primeras piezas, pero
con una dosis extra de polenta y la adición de texturas propias del jazz-rock
contemporáneo. A poco de pasados los 3 minutos y medio, emerge una sección
alucinada, bastante neurótica, free-form, desembocando en un solo de guitarra
bastante frippiano (vamos, inconfundible la fuente primaria de inspiración. En
fin, el efluvio de sofisticado fuego explosivo continúa con 91Counterpoint 92,
el cual en buena medida prosigue pertinentemente con la ambientación plasmada
en el tema precedente: esta pieza sirve como buen ejemplo particular de la
manera tan robusta en que los músicos arman sus mutuas triangulaciones. Dos
joyas del disco. Para el momento en que llegamos a 91Doldrums 92 y al resto de
temas eléctricos, ya no hay lugar para mayores sorpresas ulteriores, pero es
algo muy positivo notar que el grupo sabe mantener una sólida coherencia y un
enérgico atractivo en su propuesta musical. 91Exodus 92 más que a un éxodo
suena a una carrera contra el tiempo, con un frenesí que parece enraizado en
"speed" 96 esto es lo más cercano a Bondage Fruit a lo que llega este trío.
Otra joya del disco. 91Freestone 92 establece un puente entre el rock pesado y
el jazz-rock sobre un esquema de heavy prog 96 tal vez se trate de la pieza
más pegadiza del disco, mientras que 91Gibraltar 92 crea un híbrido entre rock
psicodélico de vieja escuela y funky-rock: en el último caso, la adición de
trucos de improvisación ayuda a crear el efecto de locura que tan bien se da a
Yoshida en cualquier proyecto musical que emprende.
Este disco es original del año 2004: la re-edición incluye bonus tracks en
vivo, temas del primer disco ejecutado en una actuación en 2005. Son pruebas
palpables de la potencia suprema de Korekyojinn "con las manos en la masa":
"Arabesque" es un disco pronto a ser apreciado por los coleccionistas de
progresivo vanguardista, en especial, los admiradores de la escena RIO-zheul
del Sol Naciente en los últimos 20 años.
César Mendoza
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