Temas
- Il 13º Transistor
- Il Corridoio Nero
- Il Vecchio Old Sea
- La Divina Commedia
- Il Pianeta della Verita
Integrantes
- Alessio Feltri: organo, piano electrico
- Mirko Ostinet: voz
- Meriado Maio: saxos, flauta
- Delio Sismondo: bateria
- Mario Pignata: bajo
- Valentino Vecchio: guitarra
Este unico aporte de parte de la oscura banda italiana Il Giro Strano al
mundo discografico no es en realidad un disco, sino una seleccion de demos
que quedaron sobre el tapete sin que terminara de concretarse un adecuado
contrato de grabacion. Es una fortuna que la tecnologia del CD haya sacado
de los pasadizos perdidos de la historia estos temas tan estupendos,
repletos de energia y fibra psicodelica, pero por otra parte, el origen
provisional de estos documentos impide que el sonido sea satisfactorio
desde el punto de vista profesional. Los dos primeros numeros son los
unicos que conservan un nivel mas que aceptable de nitidez. Es justamente
en “Il 13º Transistor” e “Il Corridoio Nero” donde se muestran los rasgos
mas notorios del nucleo sonoro de Il Giro Strano: organo agresivo donde
confluye la pomposidad aparatosa de Emerson y Lord con la psicodelia
delirante del primer Pink Floyd, una potente seccion ritmica rayana con el
hard rock, un saxo delirante muy a lo Van der Graaf, en general una labor
instrumental muy laboriosa y confiada en su capacidad de mantener largas
situaciones climaticas a traves de sus extensos vuelos sonoros – ambos
temas superan los 10 minutos. El vocalista luce un registro similar al de
Biglietto per l’Inferno, cantando desde el fondo de sus tripas y
deslomando sus cuerdas vocales para hacerse notar en medio del vendaval
sonoro de los instrumentistas. Curiosamente es el guitarrista el mayor
relegado del grupo, quien aparte de algunos solos, se limita a ejecutar
riffs y rasgueos para complementar las secuencias de organo o algunas
lineas melodicas del saxo, pero definitivamente, el rol disminuido de este
instrumento tan emblematico no afecta a la fuerza expresiva de la banda:
el organo y el saxo se encargan de mantenerla sobre sus espaldas. En
especial me llama la atencion el trabajo de Maio en el primer tema, y la
seccion final de tipo rondo en el segundo, que incluye un entusiasta (y
algo autoindulgente, a decir verdad) solo de bateria.
El tema que da titulo a este CD es una extensa suite de mas de un cuarto
de hora de duracion, y consta de cuatro secciones no tan notoriamente
delimitadas, pues la partitura es mas bien compacta. Este tema tiene un
año mas de antigüedad que los restantes: ademas, cuenta con una formacion
ligeramente diferente, en la cual el bajista ocupaba el rol de guitarrista
y el bajo estaba a cargo de un tal Riccardo Gabutti. A pesar de su largo
aliento, el tema nunca decae en tramites triviales o pasajes anodinos: el
nivel de energia es muy parejo, y ciertamente, de haber contado con mayor
letra (las partes cantadas son muy pocas, en verdad) y un trabajo mas
variado y envolvente de arreglos, hubiera estado facilmente a la par con
las composiciones mas ambiciosas de Biglietto o Museo Rosenbach, por poner
solo un par de ejemplos. Los otros dos temas son menos pretenciosos en sus
jams y extensiones, y mas bien portan un trabajo mas concienzudo de
elaboracion melodica, especialmente en “Il Vecchio Old Sea”, donde la cosa
se pone un tanto melancolica, aunque la fibra y la potencia no bajan mucho
de nivel; “Il Pianeta della Verita” retoma en parte la fuerza de los dos
primeros numeros, aunque mantiene algo de la intencion introspectiva del
tema anteriormente mencionado.
En suma, ‘La Divina Commedia’ constituye un hermoso diamante en bruto
dentro de los fecundos tesoros del antiguo progresivo italiano. Si uno
puede mentalmente apartarse de las deficiencias de audio, podra valorar de
manera genuina el ingenio y la potencia de una banda que merecio mayor
apoyo, suerte y respeto en el negocio discografico.
Cesar Mendoza
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