Temas
- Partie XV - 2:57
- Partie VI - 2:04
- Partie V - 5:09
- Partie XVI - 4:31
- Partie XVIII - 2:45
- Sans Paiers (bonus track) - 4:32
- Clémentine (bonus track) - 5:22
Líder de Fractale - Julian Julien: saxo, composiciones
Colaboradores - Vivien Philippot (saxo en 1-5), Patrice Cazeneuve (trompeta en
1-5), Jennifer Quillet (trompeta), Jon Lopez de Vicuna (saxo en 1-5), Benjamin
Vairon (batería en 1-5), Lorenz SteinmŸller (tuba), Xavier Sibre (clarinete
bajo y saxo en 6-7), Francoise Favreau (batería en 6-7), Yann Lupu (trompeta en
6-7), Laurent Dessaints (saxo en 6-7)
Fractale es el nombre de un proyecto de jazz-rock experimental dirigido por el
talentoso saxofonista y compositor francés Julian Julien: ya sea explícitamente
como solista o trabajando dentro de un esquema grupal como sucede en este caso
específico de Fractale, Julien instala una visión renovadora y fresca dentro de
la vanguardia jazzera de nuestro tiempo. "Suranné" es el título de este EP en
vivo que dura menos de media hora, tiempo más que suficiente para dejar
constancia de genialidad creativa.
Comenzamos con la secuencia de los cinco primeros temas. Durando casi 3
minutos, "Partie XV" da inicio al disco con un colorido optimista sobre una
contenida cadencia funky, un poco a lo Weather Report con aires de big band y
su oportuna dosis moderada de psicodelia: el núcleo de la composición está
indudablemente en esa arquitectura de los metales que porta una cualidad
efusiva a través de su persistente vivacidad. Acto seguido emerge "Partie VI"
para plasmar una atmósfera muy diferente, armada sobre una calma siniestra, un
coqueteo claro con la faceta más minimalista de la tradición chamber-rock, un
momento de oscuridad antes de que "Partie V" devuelva la vivacidad expuesta en
el primer tema para capitalizarla con un dinamismo más contundente. Un aspecto
adicional de esta "Partie V" es que añade una cierta aureola de inquietud por
obra y gracia de las envolventes capas de sintetizador desarrolladas a
contrapelo de las orquestaciones de saxos; esto, combinado con la cadencia casi
"mecanizada" de la base rítmica en sus aspectos más recurrentes, parece
establecer nexos con ciertas modalidades del krautrock dentro de un bloque
sonoro general que se mantiene firmemente asentado en la ideología
jazz-rockera. En el caso de "Partie XVI" sí tenemos un retorno en pleno al
vigor colorido de "Partie XV" que se hace eco de la intensidad especial de
"Partie V" pero sin mayores atisbos de inquietud. La labor de los saxos se
siente más suelta, robusteciendo así los aires celebratorios sobre los que se
construyó la idea compositiva. "Partie XVIII" tiene un aire de elegía solemne,
al modo de un bolero sinfónico que homenajea la gloria dichosa de una etapa
pasada que dejó tras de sí una pesada carga de melancolía: un final
estilizadamente explosivo para esta secuencia.
Los dos últimos temas del disco son explícitamente designados como bonus
tracks: "Sans Paiers" regresa al colorido ágil de los momentos más alegres de
la secuencia precedente, estableciendo un interesante punto de encuentro entre
el Weather Report de "Sweetnighter" y el Soft Machine de "Seven"; por su parte,
"Clémentine" elabora una idea consistentemente nebulosa sobre una cadencia
juguetonamente entrecortada, generando así una imagen sonora de oscura
travesura para concluir el álbum. De este modo concluye "Suranné", una
exhibición del enorme talento e infatigable espíritu de aventura que Julian
Julien exhibe como músico y compositor: este proyecto Fractale es, por cierto,
un estupendo vehículo de expresión para exponer renovadoras modalidades de jazz
vanguardista como ésta. Dijimos en el primer párrafo que menos de media hora
era tiempo más que suficiente para que el genio musical se muestre de forma
clara e inequívoca=85 pero cuando hay un repertorio tan bueno como éste=85
!!qué corto se siente este tiempo!!
César Mendoza
|