Temas
- Aufbrich Nach Tumanien
- Verwirrung
- Telepathia
- Kampf der Machte
- Das Unheil Breitet Sich Aus
- Die Estscheidung
Integrantes
- Werner Diermaier: bateria, voz, maestro de ceremonias
- Hans Joachim Irmler: organo, sintetizador, efectos
- Steven Wray: guitarra, efectos
- Thomas C. Martin: guitarra, efectos
- Lars Bukstat: percusion, citara
- Michael Stoll: bajo
Cuando en los 90s la mitica banda germana Faust decidio reunirse (con el
retorno de algunos de los miembros originales), no se limito a reedificar la
linea musical tan peculiar que habian practicado en la primera fase de su
carrera musical, sino que ademas se embarcaron en varios otros proyectos
musicales que les permitian explorar nuevos mundos sonoros. Uno de tales
proyectos fue “Faust Wakes Nosferatu”, una funcion multimedia en la cual
Faust – como sexteto – ofrecia una banda sonora casi totalmente improvisada
para la pelicula “Nosferatu” de Murnau (1922), mientras esta estaba siendo
proyectada en una pantalla colocada a espaldas de los musicos. Una de estas
presentaciones es recogida en esta edicion de CD: tambien existe una edicion
doble en vinilo, que incluye unas ciertas modificaciones respecto a la
edicion y montaje en la consola de sonido, en comparacion con lo que tenemos
en este CD.
El material del disco consiste en una serie de landscapes tenebrosos y
apabullantes donde los extravagantes efectos de las guitarras y el teclado
crean densas cortinas sonicas que mas que envolver, insertan al oyente en
una oscura camisa de veintidos varas, no a punta de autoritaria agresividad,
sino mas bien apelando a una invocacion del lado mas oscuro de su psique,
como si se le regalara una vision de algo que preferiria no ver, pero cuya
atraccion es inexplicablemente irresistible. Mientras tanto, la seccion
ritmica apunta hacia lo languido y lo caotico, logrando asi reforzar de
manera tremendamente efectiva la sensacion de apabullamiento en el oyente.
El resultado es algo mucho mas cercano a lo que hicieron Kluster o los
primeros Tangerine Dream alla a fines de los 60s, durante el ‘periodo de
parto’ del krautrock. Los que ya conocen la obra setentera de Faust no deben
esperar una retoma de los collages neuroticos que ayudaban a dar forma a sus
alucinadas amalagamas de diversas ideas musicales (el disco “Ravvivando”, de
1999, si se apunta por la linea de recuperacion del viejo Faust). Aqui hay
un total alejamiento de la melodia, la secuencia ritmica bien definida; en
su lugar, impera la filosofia de los sonidos aleatorios y los ambientes
terrorificos, explorados y explotados hasta limites mas cinematograficos que
propiamente musicales. La fuerza del material se funda en el poder evocativo
de lo siniestro: no hay que buscar aqui nada como un efluvio de potencia
rockera, ni tampoco un despliegue orquestal-operatico al modo de algunas
bandas de goth.metal, sino mas bien una remision a la primera vanguardia
germana, que aludimos al inicio de este parrafo. En cierta medida, parece
que los veteranos de Faust se han valido de la savia nueva brindada por los
nuevos miembros (ocasionales) para asi ingresar en el area del post-rock con
un aire de confianza, sin que este recurso se haga forzado o artificial.
Los dos primeros temas son las piezas mas extensas del repertorio (22 y 18
minutos, respectivamente), permitiendose asi presentar la linea general del
disco, asi como un campo extenso para los juegos de efectos y ambientes
propuestos en este show multimedia. El segundo de estos temas contiene una
dosis mas pronunciada de rock psicodelico, aunque ciertamente lo ambiental
esta mas presente que lo estructurado. ‘Telepathia’ me parece aun mas
tenebroso que los dos temas precedentes, mientras que ‘Kampf der Machte’
incluye una seccion claramente delineada en terminos de articulacion
ritmica, permitiendo asi que por algunos momentos entre una vibracion de
aire fresco en el repertorio. ‘Das Unheil Breitet Sich Aus’ (otra pieza
extensa ,esta vez de 12 minutos), nos retrotrae plenamente a la densidad
inescrutable del tema de apertura. El tema de cierre concluye con una
cadencia ritmica apoyada sobre una secuencia percusiva entre mecanica y
tribal, como señalando el latido perpetuo de las criaturas vampirescas:
siempre que escucho el tema final evoco la imagen alucinada del viudo de la
sacrificada heroina, convertido en un vampiro y huyendo fuera de la ciudad
para nunca mas habitar en un lugar donde el sol pueda hacerle daño... un
final esplendido, en verdad.
Segun reportan algunos periodistas musicales, fueron varios los fans que
abandonaron la sala de conciertos antes de concluir la presentacion de la
banda, pues obviamente esperaban algo distinto, y en cambio se enfrentaban a
algo mas perturbador e inquietante. Por mi parte, yo me imagino que debe
haber sido toda una experiencia estetica el estar viendo un clasico
expresionista del cine mudo de horror europeo, con unos masicos alucinados
improvisando su propia banda sonora personal con instrumentos y efectos de
la vanguardia electronica: la oscuridad al cuadrado... Ningun ambiente
resulta mas idoneo para inspeccionar el lado mas obtuso y misterioso de
nuestros temores mas intimos: “Faust Wakes Nosferatu” es una obra diseñada
para perturbar alevosamente al oyente.
Cesar Mendoza
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