Temas

1. Disconnected (Part 1)
2. One
3. So
4. Pieces of Me
5. Something from Nothing
6. Still Remains
7. Disconnected (Part 2)

Interpretes

• Jim Matheos: guitarras, teclados
• Roy Alder : voz
• Mark Zonder: bateria Colaboradores – Joey Vera (bajo), Kevin Moore (teclados)

Los discos son obras de arte que al ser lanzados al mercado se convierten en entes con una personalidad definida, entrando en comunidad con las obras precedentes y posteriores en un clima combinado de cohabitacion y competitividad: el escrutinio del publico es el que decide cual de estos factores es el predominante a la hora de formarse sus opiniones y emitir sus juicios, y dado que el disco anterior a “Disconnected” era el ambicioso concept-disc “A Pleasant Shade of Gray”, la competitividad fue el criterio primordial a la hora de darle un lugar al disco que estamos reseñando ahora. Afortunadamente, asi como el consenso general apuntaba a señalar al “Pleasant Shade” como una obra bisagra y a la vez maestra de FW, tambien cuando “Disconnected” salio a la luz publica tuvo una buena acogida – la razon principal radico en que la mayoria de los admiradores de esta banda norteamericana (entre los cuales se incluye quien esto escribe) supo apreciar la confluencia entre la onda intimista y melancolica del “Pleasant Shade” y la adicion de una fiereza metalera adusta y cortante: el resultado se tradujo en un disco lleno de una fuerza expresiva administrada con inteligencia y sutilezas varias, especialmente en los sugerentes juegos de riffs y las cautivantes cortinas de sintetizador, las mismas que encuentran un ancla eficaz en la firme dupla ritmica – mencion especial, como siempre, a la clase que exhibe Zonder en su manejo de los tambores y platillos varios de su intrumento. Tampoco constituye una sorpresa el hecho de que Alder sepa derrochar tanta emotividad genuina y tecnica en su canto a traves de cada una de las silabas que desliza en los temas 2-6. En buena medida, teniendo ademas en cuenta que los musicos en este disco son los mismos que en la ocasion anterior, este disco muestra varios elementos de continuidad en relacion con la ocasion anterior, pero quedan claras las intenciones de FW de no apelar a una mera clonacion de una antigua buena idea.

La retoma frontal de la fiereza metalera se hace claramente manifiesta en el explosivo tema ‘One’, que explota como un frenetico testimonio de angustia tras la breve introduccion eterea de ‘Disconnetced (Part 1)’, y la misma voragine heavy resurge en ‘Pieces of Me’: teniendo ambos temas una duracion no mayor de 4 minutos y medio, se instauran asi como las piezas con mayor gancho del disco, aunque no por ello estan exentas de arreglos tipicamente progresivos – ingeniosas progresiones de acordes, complejos patrones ritmicos. El factor progresivo aparece mas conciezudamente desarrollado en las piezas mas extensas, las cuales son ‘So’, ‘Something from Nothing’ y ‘Still Remains’. El primero de los numeros mencionados se basa largamente en un juego sencillo de acordes que se extiende sobre un languido compas, permitiendo de esta manera a Alder contar con el espacio adecuado para cantar al agotamiento espiritual que se describe en las liricas. ‘Something from Nothing’ expone una mayor dosis de fastuosidad, la misma que aparece reciclada a traves de recursos sintetizados ambientales muy en la onda del rock industrial (algunos obvios aires de familia con Chroma Key, por cortesia de Moore, y tambien con el lado mas hipnotico de NIN), sazonado con la psicodelia estilizada del Pink Floyd de “Wish You Were Here”: es curioso como un tema tan evocativo puede sonar tan opresivo y energico como el tipico tema metalico sin recurrir a solos mega-pomposos ni compases ultra-freneticos, sino simplemente a un manejo inteligente de la densidad hecha sonido. Pero lo mas fastuoso y pretencioso del disco esta reservado para el temazo ‘Still Remains’, el mismo que a traves de sus 16 minutos de duracion encarna una impresionante amalgama donde se recapitula fluidamente todos los elementos mas recurrentes del repertorio precedente: yo me auno a todas las voces que han proclamado a ‘Still Remains’ como la pieza cumbre de este disco, e incluso me atrevo a añadir que se trata de una de las joyas mas brillantes de toda la historia del grupo. La languidez melancolica de la seccion final de ‘Still Remains’ le permite engarzarse con el instrumental que cierra el album: ‘Disconnected (Part 2)’ retoma la densidad distante y tenebrosa de ‘Something from Nothing’, con un fondo de voces que proviene de la grabacion de una sesion de espiritismo durante la cual supuestamente el fantasma de un sacerdote exponia la sensacion de estar en el mas alla como un alma desencarnada. Bueno, “mas alla” de este detalle parapsicologico, la verdad es que en ‘Disconnected (Part 2)’ ofrece un brillante broche de oro para un disco diseñado para destilar energia electrica y densidad misteriosa en dosis equivalentes. La maestria del grupo y la creatividad de Matheos - autor de todos los temas - garantizan que esta idea sea llevada a buen puerto en “Disconnected”.

Cesar Mendoza