Temas
- El Poeta del Ruido (7:38)
- Orgon Patasísico - Part I (1:29)
- Orgon Patasísico - Part II (6:38)
- Fakma (3:32)
- El Fin de los Dodos (3:53)
- Terapia de Fakirato (6:42)
- Manati (5:27)
- El Titosco (1:52)
Integrantes
- Jaime Castañeda: batería, percusión, violín, voz
- Carlos Robledo: teclados, cintas, trompeta, guitarra, flauta, marimba,
percusión, voz
- Alejandro Sánchez: violín, clarinete, piano, bajo, trombón, percusión, voz
- Walter Schmidt: bajo, guitarra, órgano, flauta, saxofón, sintetizador, voz
Músicos adicionales – Carlos Alvarado (teclados), Javier Baviera (clarinete,
saxofón), Víctor Robledo (violín, sintetizador), Jean Luis Romero (clarinete)
Decibel es la banda mexicana que gestó algunas de las páginas doradas de la
vanguardia mexicana – su propuesta rock in opposition es sólida y osada,
transmitiendo un carácter y personalidad propiamente maduros a través de las
obvias influencias recibidas de Henry Cow, Faust, Univers Zero (recordemos que
ya había salido al mercado su disco debut “1313”), además de las teorías
académicas de Cage y Stockhausen.
La pieza homónima abre el disco comienza con una serie burlona de efectos de
sonido que emulan una fauna de aves, un anuncio dadaísta del potente despliegue
de disonancias y tensiones que tiene lugar por más de 7 minutos – los
imposibles quiebres rítmicos, repletos de síncopas varias, y los explosivos
efluvios del piano generan la serpenteante columna vertebral del tema hasta su
clímax final. He aquí lo que pasa cuando se mezclan Henry Cow y una versión
frenética de Magma. Los dos temas que siguen a continuación completan la dupla
de ‘Orgon Patasísico’. Ambas piezas se enfilan hacia lo misterioso y lo
atmosférico, por vía de una apuesta sórdidamente hermética por la musique
concrete y el ruidismo electrónico. Este paradigma deconstructivo,
primordialmente inspirado en Stockhausen, se perpetúa en ‘Fakma’ y ‘El Fin de
los Dodos’. La primera de estas piezas introduce una dosis aumentada de
tenebrismo a la extrema inquietud inherente a este tipo de caos sónico; por su
parte, ‘El Fin de los Dodos’ adquiere unas tonalidades cósmicas que incrementan
el clima de oscuridad, como retorciéndose mientras nos vamos adentrando más en
ella. ‘Terapia de Fakirato’ comienza con un lánguido preludio de piano que se
extiende hasta los primeros 80 segundos; de inmediato, el ensamble integral
exhibe un viaje sonoro sólido, exquisito en su sombrío y controlado dinamismo.
El asunto desarrollado aquí muestra varias afinidades con el Univers Zero del
“1313”. ‘Manati’ nos devuelve al caos aleatorio y flotante de temas anteriores:
la peculiaridad de esta pieza en particular es que se añaden ambientes tribales
que sirven para canalizar sonoridades de raíz étnica. ‘El Titosco’ completa el
repertorio oficial con una breve reconsideración de la faceta más extrovertida
del grupo.
La edición digital incluye nada menos que 8 bonus tracks. ‘Notas sin Dueño’
explora lntereses zheul, mientras que ‘Mucilago Binomial’ elabora un filtro
fusionesco para la esencia RIO de la banda. Ahora vienen los bonus en vivo.
‘Mensaje desde Fomalhault’ es un soundscape de consola que emula sonidos de
vientos torrenciales que finalmente aterriza en un delirio Faustiano con bases
de piano, platillos de batería y voces humanas bizarramente recicladas a través
de cintas magnetofónicas. ‘Fragmento del Poeta del Ruido’ es lo que más o menos
dice el título, una reelaboración de uno de los motivos pulsacionales de ‘El
Poeta del Ruido’. En este caso, el frenesí rítmico es menos pronunciado,
optando el cuarteto base con su invitado de turno por establecer un esquema
sonoro crecientemente denso, incluso llegando a picos de intensidad
surrealista: la fuerte presencia del sintetizador añade un componente hipnótico
al asunto. ‘!Algo!’ es un muestrario de ruidismo minimalista, mientras que
‘?Acaso Estoy en un Lecho de Rosas?’ es una poderosa dupla free-form de batería
y efectos cibernéticos de sintetizador. ‘Improvisation en Blanco y Negro’
establece un ahondamiento en las pautas RIO establecidas por Henry Cow en su
“In Praise of Learning”, mientras que ‘Falso Jericó’ recupera el caos más
radical estilo Decibel.
Decibel es todo un fenómeno de experimentación musical llevada hasta extremos
desafiantes de abstracción y deconstrucción – lejos de ser meros acólitos de
los grandes nombres del RIO provenientes de un exótico país latinoamericano,
Decibel construyó efectivamente una voz propia dentro de la vanguardia
progresiva. “El Ruido del Poeta” es un tesoro imperdible para cualquier
seguidor de la música vanguardista.
César Mendoza
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