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LA LISTA DE CORREO HISPANO-PARLANTE SOBRE ROCK PROGRESIVO Y SINFÓNICO 
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 COLOSSEUM II: “Strange New Flesh” (1976)

Temas

  1. Dark Side of the Moog
  2. Down to You
  3. Gemini and Leo
  4. Secret Places
  5. On Second Thoughts
  6. Winds

Integrantes

  • Don Airey: teclados, sintetizadores
  • Jon Hiseman: bateria, timpanos, gongs
  • Gary Moore: guitarras, coros
  • Neil Murray: bajo
  • Mike Starrs: voz

“Strange New Flesh” fue el disco con que un renovado Colosseum volvio a la escena musical, bajo la tutela del entusiasta baterista Jon Hiseman, quien ya habia pasado por la experiencia del hard rock con la banda Tempest. Ahora, dispuesto a volver a las lides del rock progresivo (genero del que Colosseum se cuenta como uno de sus pioneros), convoco a tres excelentes musicos y un vocalista de registro tenor y tendencia R’n’B para formar Colosseum II. Las aproximaciones que el ensamble tiene con el hard rock y el rock bluesero (como Jeff Beck, por ejemplo, quien parece ser uno de los referentes principales de Moore), el jazz fusion de Return to Forever y el sinfonismo ostentoso de ELP son faciles de notar, pero seria un poco injusto, en mi opinion, limitarnos a ver a los grupos antes mencionados como meras influencias. Si vemos la situacion desde una perspectiva mas profunda, advertiremos que lo que hace Hiseman, en coalicion con su nueva compañia, es recoger la cosecha de una siembra de la cual el fue parte desde fines de los 60s. Los aportes compositivos de Moore y Airey vienen a darle una savia nueva a un excelente arbol veterano y renacido.

El tema que abre el disco es un instrumental tremendamente poderoso y cautivante; ‘Dark Side of the Moog’ sirve como un efectivo vehiculo para que el ensamble luzca su faceta mas potente con total soltura, siendo asi que Airey es quien asume el rol protagonico con sus alucinantes aportes en organo, sintetizadores (atencion especial al ultimo solo de Moog) y un piano electrico con distorsion, mientras Moore solea sin romper la voz de mando que establece el teclista. La dupla ritmica funciona como una maquinaria bien afiatada que cumple con precision la labor de sostener el fundamento para el vendaval sonoro provisto por sus dos colegas instrumentistas. Sin duda que muchos oyentes habran de sentirse enganchados con esta gozada. A continuacion la intensidad baja un poco los decibeles para dejar paso a ‘Down to You’, un cover de un tema de original de Joni Mitchell que aqui es transformada en una balada R’n’B, expandida gracias a los evocativos solos de Moore y los ambientes medio cosmicos provistos por los arreglos de sintetizador de cuerdas de Airey. Tambien se incluyen un hermoso interludio de piano clasico compuesto por el mismo Airey

  • sobre el cual la guitarra acustica emite un breve pero hermoso contrapunto
  • y un jam jazzero que se inicia a los cinco minutos y medio, y que se prolonga por mas de un minuto hasta que un nuevo solo de Moore nos devuelve al motif inicial. ‘Gemini and Leo’ es una pieza de rock bluesero sobre una base funky, ameno, excitante, lo suficientemente llamativo como para suponer que fue compuesto para single, y lo mismo podemos decir del pegadizo ‘Secret Places’ que viene despues, donde el hard rock y el R’n’B se fusionan fluidamente. En esta ultima pieza queda claro que la linea rockera de Moore y la vieja escuela de Colosseum son perfectamente compatibles – este numero no hubiera estado fuera de lugar en cualquiera de los discos del Colosseum original... solo que se extraña la presencia de un saxo, para aumentar un poco mas la polenta.

‘On Second Thoughts’ comienza con un etereo fraseo de guitarra complementado por unas sutiles aportaciones de piano electrico que completan el cuadro sonoro introspectivo: al entrar el vocalista y los demas en escena se despliega la estructura bluesera del tema, el mismo que se desarrolla con un aura de melancolia que el vocalista carga sobre sus espaldas con convincente naturalidad. Justo despues de que ha pasado el momento de mayor intensidad, regresamos a la cadencia eterea del inicio, con unos hipnoticos punteos de guitarra acompañados de tecturas de piano electrico y sinteitzador, y unos timpanos que añaden un bizarro pero nada pomposo tono epico: esta manera tan elegante de manejar el talante sentimental de la cancion resulta una verdadera muestra de ingenio. La ultima pieza, que es tambien la mas extensa, rescata el nivel incendiario de energia que habia sido introducido en el tema de entrada, aunque con un mayor enfasis en el jazz. Justo cuando desparecen los ultimos ecos de los timpanos de Hiseman en el tema anterior, este da rienda suelta a un solo de bateria no muy extenso, el cual da inicio a ‘Winds’. Parece que la banda esta mas entusiasmada que nunca, en especial Hiseman, quien no se cansa de adornar su labor con inmensos redobles, y Moore – este ultimo parece convertido en un punto de confluencia entre McLaughlin y Beck. Airey, por su parte, sostiene las armonias de piano electrico y organo con la misma soltura con que emite sus solos de sintetizador. La labor de la dupla ritmica en bloque es incansable: las mejores parte de bajo a cargo de Murray estan aqui.

En suma, este es un disco bastante intenso, pletorico de energia, y con la suficiente complejidad como para resultar por lo menos interesante para el fan progresivo promedio. Yo, en lo personal, lo encuentro mas que simplemente interesante: “Strange New Flesh” es muy bueno, y el entusiasmo vertido en su realizacion es contagiante.

Cesar Mendoza

Creada en 1997. ©José Manuel Iñesta. Alojada en el Depto. de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad de Alicante, España.

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