Temas
- Couleurs (a. Premiers Pas ; b. La Traversee des Sables ; c. Dernier
Village... Premieres Neiges ; d. Recontre ; e. Les Portes du Silence)
- Naissance
- Le Miracle de la Saint-Gaston
- Laure
- Tramontane
- Divertimento
Integrantes
- Gilbert Abbenanti: guitarras
- Christian Tuchi: teclados, voz
- Claude-Marius David: flauta, saxo soprano
- Alain Berge: bajo
- Alain Faraut: bateria, percusion
Este es el segundo trabajo de Carpe Diem, uno de los grupos mejor
considerados por los investigadores de la historia del prog en el terreno
del sinfonismo melodico. Cueille Le Jour es una obra que apuesta
frontalmente por la belleza serena y la creacion pausada de ambientes
emocionales cautivantes, a traves del inteligente empleo de texturas y el
sutil artificio de transmitir una energia poetica a traves de lineas
melodicas no demasiado ampulosas, incluso recurriendo a la reiteracion con
la finalidad de apuntar hacia ciertos puntos de climax. Pero nunca hay
explosiones desaforadas… siempre se mantiene un aire de serenidad reflexiva
en el disco. La manera en que se articulan las composiciones y el dialogo
fluido mantenido constantemente por los musicos ayuda al repertorio a
adquirir una cierta magia, extra˜na e irresistible a la vez. En medio de
este manejo de texturas, los solos de guitarra, vientos y teclado aparecen
con la funcion principal de a˜nadir retazos de colorido que armonizan muy
bien con la integralidad de cada pieza. Por su parte, la seccion ritmica
funciona como un soporte preciso, muy puntual, aportando en numerosas
ocasiones elegantes sincopas de corte jazzero. Tambien noto varios quiebres
jazzeros en la manera en que el vientista maneja sus solos, pero es el
sinfonismo el que marca la tendencia predominante en el estilo de Carpe
Diem: supongo que eso se debe a la presencia predominante de los teclados de
Tuchi.
El lado A del vinilo consiste en una suite de cinco secciones, Couleurs, que
es el punto maximo del disco, e ilustra a la perfeccion los puntos que he
expuesto en el parrafo anterior. Pero los temas mas concisos del lado B, a
pesar de no ser tan brillantes, no suponen un desmedro para la calidad
estetica del disco. Temas como Naissance y Le Miracle de la Saint-Gaston
exhiben la misma belleza serna y envolvente de la suite, aunque no con tanto
esplendor. Pareciera como si la creatividad de Carpe Diem solo pudiera
brillar de manera plena en los temas de ambiciosa prolongacion. Tras pasar
por un breve momento divertido de tono casi funky en Laure, Tramontane nos
devuelve la serenidad habitual, aunque sin dejar de incluir pasajes
medianamente veloces y con gancho. Finalmente, el dueto de piano y saxo
soprano titulado Divertimento cierra el disco con un toque de melancolia,
rayana con la solemnidad, una despedida de buenas noches que contrasta con
la riqueza emocional de la suite que habia abierto el disco.
En suma, un disco repleto de belleza y que puedo considerar como uno de los
indispensables de la tradicion sinfonica gala.
Cesar Mendoza
|