Temas
- Ces Gens-la
- Aujurd’hui C’est la Fete de l’Apprenti Sorcier
- Bivouac 1ere Partie
- L’Espionne Lesbienne
- Bivouac Final
- De Temps en Temps
- La Route aux Cipres
- La Cimitierre des Arlequins
Integrantes
- Christian Decamps: voz, teclados, guitarra acustica
- Francis Decamps: teclados, coros
- Jean Michel Brezovar: guitarras, flauta, coros
- Daniel Haas: bajo, guitarra acustica, coros
- Gerald Jelsch: bateria, percusion
Esta es una de las indudables obras cumbres de Ange (reconozco de antemano
que ‘Au-dela du Delire’ es mi favorito personal), y debido a su filo aspero
y envolvente clima sombrio, todo un clasico del sinfonismo galo.
El disco abre con un cover del tema de Jacques Brel “Ce Gens-la”, siendo asi
que Ange logra exitosamente conservar la pasion del tema original a la vez
que la reciclan a traves de su propio filtro estetico. El tema siguiente
tiene un porte rockero mas potente, oportunamente sazonado con un interludio
armado sobre texturas sutiles de teclado. El triptico compuesto por
“Bivouac”, “L’Espionne Lesbienne” y “Bivouac Final” es uno de los momentos
cumbre del disco. El primer tema comienza con un tono farsesco clamoroso,
que luego deja paso a un jam casi rayano con el jazz fusion; el segundo tema
vuelve a lo farsesco, pero esta vez en clave de folk acustico y por eso
mismo, con un tratamiento mas delicado (las partes de flauta son
deliciosas... aunque lastimosamente muy breves); finalmente, el tercer tema
es un reprise del jam anterior, pero esta vez extrapolado por unas densas
cortinas de mellotron y retazos de guitarra, que crean una ambientacion
onirica sublime, e incluso un tanto ‘opresiva’.
El lado B del vinilo se inicia con la balada “De Temps en Temps”, semejante
en estructura y emotividad a “Ce Gens-la”. La balada acustica que viene a
continuacion funciona como un oportuno respiro antes de la explosion sombria
vertida en el tema que da cierre y titulo al disco. Efectivamente, en “La
Cimitiere...” se respira un clima de sombrio misterio e inquietud neurotica:
no es un tema muy veloz, pero si es emocionalmente trepidante, especialmente
en los ultimos minutos, donde se produce un crescendo vocal e instrumental
que estalla en un delirio tetrico, dando luego paso sucesivamente a un falso
climax sinfonico casi ‘debussyano’ y una secuencia de mecanismo de
relojeria. Un tema realmente impresionante, uno de los mejores que conozco
de la carrera de esta banda. Finalmente, este elogio se hace extensivo a
todo el disco en conjunto.
Cesar Mendoza
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