Temas
1 - Mercredi matin (0:22)
2 - Saure gurke (Aus 1 urwald gelockt) (2:21)
3 - Animaux velpeau (0:36)
4 - Milano per caso (3:19)
5 - Fausto coppi arrive! (1:09)
6 - Chanter est sain (3:09)
7 - Son of l'idiot (3:21)
8 - DBB (Double bind baby) (3:28)
9 - Cuic steppe (4:20)
10 - Tous les trucs qu'il y a lá dehors (1:59)
11 - Ciobane (0:24)
12 - The mooche (1:36)
13 - Vapona, not glue (6:54)
14 - Glympz (4:37)
15 - Three epileptic folk dances (2.20)
16 - Mastoul alakefak (9:17)
17 - Comme on a dit (1:12)
Integrantes
- Marc Hollander: teclados, órgano Farfisa, saxo alto, clarinetes alto y bajo,
flauta, percusión, mandolina, caja de ritmos
- Vincent Kenis: guitarras, bajo, acordeón, piano Fender Rhodes, percusión
Colaboradores - Chris Joris (percusión, teclados, saxo soprano), Marc Moulin
(teclados), Catherine Jainaux (voz en 4 y 16), Paolo Radoni (guitarra en 4),
Jeannot Gillis (violín en 4), Lucy Grauman (voz en 6), Ilona Chale (voz en 6),
Juliette (voz en 10), Lee Schloss (saxo soprano en 17), Michel Berckmans (fagot
en 16), Denis van Hecke (cello eléctrico en 16), Frank Wuyts (teclados en 16),
Geoff Leigh (saxo en 16)
Aksak Maboul es una banda belga asociada a la muy nutrida movida francófona que
se desarrolló bajo la guía del rock in opposition, aunque estrictamente no se
trata de una banda de RIO: más bien se puede catalogar como banda de rock
ecléctico experimental, así de simple, sin mayores dilemas. En todo caso, su
explícito deseo por romper reglas de juego del rock y la pronta asociación con
grupos y músicos del movimiento RIO pusieron a Aksak Maboul en el mapa de esta
vertiente. Básicamente, Aksak Maboul es el resultado de la asociación de Marc
Hollander y Vincent Kenis, dos músicos que compartían la inquietante meta de
crear música ecléctica sin tapujos y con unas ganas enormes de aprovechar
recursos low-tech sin complejos, todo al servicio de la inagotable creatividad
que ambos gestaban desde su formación en 1974 hasta el año del lanzamiento de
su primer disco "Onze Danses Pour Combattre La Migraine", 1977. Este disco es
tremendamente peculiar, irrepetible dentro de la vanguardia europea de los 70s,
pero ciertamente se puede notar la ulterior influencia de AM en grupos
estadounidenses como 5uu's, Birdsongs Of The Mesozoic (sus primeros discos) y
Rascal Reporters (toda su obra). Casi todos los temas son compuestos por
Hollander, y encima muchos de ellos lo tienen a él como músico exclusivo: aún
así, "Onze Danses=85" quedó para la posteridad como una empresa grupal, y de
hecho, el dúo contó rápidamente con músicos de apoyo para llevar su música a
los escenarios. Fue en ese momento que Hollander entró en contacto con músicos
de Univers Zero y Henry Cow, en lo que comenzaría a ser la gestación del
material del segundo disco de la banda, pero dejamos eso por ahora para otra
reseña. Por lo pronto, nos concentraremos en este disco debut.
Las tres primeras viñetas musicales establecen un clima de relax y gallardía
aventurera simultáneamente, contando con una instrumentación no muy prolija que
digamos: 'Mercredi matin' desarrolla un ambiente exótico, 'Saure gurke (Aus 1
urwald gelockt)' elabora una etérea cadencia jazz-latina y 'Animaux velpeau'
exhibe un trío de maderas muy en línea con la cámara post-moderna. No tenemos
ni 3 minutos y medio de disco y ya contamos con un oportuno muestrario del tipo
de innovaciones hacia el cual se enfila este ensamble. 'Milano per caso' es una
pieza compuesta con el espíritu de cabaret y con un bloque sonoro (guitarras
acústicas, acordeón, canto femenino) que lo acerca al espíritu bucólico
mediterráneo. 'Fausto coppi arrive!' es un breve interludio de maderas que abre
el camino sucesivamente para los cálidos aires de la muy deconstruida balada
'Chanter est sain', el jazz-fusión atmosférico de 'Son of l'idiot', el
minimalismo grisáceo de 'DBB (Double bind baby)' y la misteriosa agilidad de
'Cuic steppe': este último contiene citas de 'Milano per caso' y 'Fausto coppi
arrive!' antes de culminar. La primera mitad del disco se cierra con 'Tous les
trucs qu'il y a lá dehors', un ejercicio de improvisación al piano eléctrico a
partir del ágil canto de una tierna infante (que se llama Juliette). 'Ciobane'
abre la segunda mitad del disco al modo de una pequeña travesura renacentista,
dejando así que los tratamientos lúdicos de corte fusionesco vertidos en la
secuencia de 'The mooche' y 'Vapona, not glue' destilen su coqueto colorido.
'Glympz' se engarza seguidamente para elaborar un ejercicio de fusión que
mezcla las cadencias jazzeras de unos Weather Report (en su faceta más sutil)
con una intrigante percusión tribal. 'Three epileptic folk dances' es una pieza
tripartita que comienza con un contrapunteo parcialmente semejante al esquema
Gentle Giant, luego continúa con una mezcla de funky y disonancias neuróticas
al saxo y al sintetizador, concluyendo finalmente con una refinada arquitectura
al más puro estilo chamber-rock. 'Mastoul alakefak', con sus más de 9 minutos
de duración, es la pieza más extensa del álbum: en realidad se trata de un tema
que en su versión original duraba solamente 5 minutos y pico, pero en la
edición digital se añadió una improvisación basada en su motivo recurrente
registrada en un concierto que tuvo lugar un año después. El tenor inicial de
la pieza se enmarca en envolventes sonoridades de inspiración jazzera, con un
amplio protagonismo de la dupla de pianos eléctricos; a poco de pasado el
ecuador del tema, que es cuando se inserta la porción en directo, el ambiente
se torna denso y se acerca hacia los patrones del space-rock, con adornos
caóticos emitidos por los vientos y la guitarra eléctrica mientras que la
secuencia de sintetizador bajo ocupa un mayor relieve. El epílogo del disco,
'Comme on a dit', aporta un momento de estilizada serenidad contemplativa.
Marc Hollander es el fundador del sello independiente Crammed Discs, el cual
sigue dirigiendo hasta el día de hoy en su afán por difundir la vanguardia que
se desarrolla muy al margen de los dictados del mainstream. Su entrada al
negocio como músico significó un manifiesto frontal en este sentido, tal como
demuestra "Onze Danses Pour Combattre La Migraine" - Aksak Maboul es un ítem
muy importante para toda acérrima colección de música experimental.
César Mendoza
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